Hace poco más de veinte años participé en un programa de televisión conducido por el Chele Rucks, que se llamaba "Personajes célebres" y consistía en analizar pistas hasta dar con el nombre de algún ser humano notable, inscrito en los anales de la historia. Avancé unas cuantas rondas hasta ser justamente derrotado por M.A.H., un colega de profesión docente, también aficionado a la escritura creativa y al ajedrez. Manuel es (creo) como diez años mayor que yo y ya era por aquel entonces una enciclopedia andante (y al decir de alguna excelsa entrada que le ha dedicado nuestro común amigo Javier Alas en su blog, aún lo es).
Uno de estos días, una colega de trabajo que recordaba aquella famosa participación me preguntó si ya me había inscrito en el programa "Quién quiere ser millonario", pues a su juicio yo podría fácilmente contestar las preguntas y hacerme de ese dinerillo que están regalando. Pero he aquí que tengo una pequeña lista de razones por las cuales no deseo emprender tal aventura. Van en orden de "según como se me van ocurriendo".
- Suponiendo que avanzara hasta las instancias finales, es mucho dinero puesto en un escaparate con rostro, nombre y apellido, todo un auto-atentado en los tiempos que corren.
- Temo caer eliminado con una pregunta de respuesta bastante obvia, incluso tonta.
- Habiendo visto la película "Slumdog millionaire", uno se inhibe y además desconfía.
- No deseo prestar mi rostro ni mi bien ganado prestigio personal en un juego que alimenta las fantasías del gran público sobre el dinero fácil y el éxito inmediato sin otro mérito más que el puro azar.
Espero que a ningún/a comentarista se le ocurra interpretar mis razones como excusas para no hacer algo que me da pena pero que en realidad deseo en lo íntimo. ¡Psicoanalistas: abstenerse!
6 comentarios:
Ud. en realidad, en lo más íntimo, desea participar. Pero como le da pena...
Posdata: la exhortación a la abstención psicoanalítica es extensiva para todos los demás especímenes, incluido (especialmente) el anterior firmante.
Hmmm, interesante. ¿Sabe qué, sabe qué? Su estilo de redacción del último párrafo me recuerda a mí.
No sé si esto es psicoanálisis... aunque no lo creo.
Tiene razón, más es la humillación que se enfrenta al no saber algo, y más si es en televisión. ¡No gracias!
Yo que antes creía que aquí uno se expresaba libremente, pero ya veo que la línea editorial se ha endurecido!!!!, jijijiji...
Como dice la cultura popular: explicación no pedida......¿lo inscribimos?....MB
Hace poco en mi casa me estaban jodiendo pra que participara, usted me dio los argumentos ganadores para decir "no". ¡Muchas,muchas gracias!
Gochez, usted avanzaria facilmente (he visto el programilla solo una vez...) pero le doy la razon,dinero facil, facil se va... no vale la pena!
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